A media cuadra

domingo, 12 de agosto de 2012

En donde se establecen retos para la ciudad y la localidad en lo referente al fomento de la comunicación comunitaria para la movilización del pueblo o señales de para donde moverse




Bajo el argumento de consolidar mercados competitivos para los medios de comunicación  y de fortalecer la industria mediática nacional para, supuestamente,  favorecer la democratización en la propiedad de los medios, El Estado ejecutó políticas de privatización en forma progresiva. Estas políticas en vez de lograr la democratización,  consolidaron fue la  concentración de los medios de comunicación, y luego, su vinculación a mercados globales. Los grupos económicos lograron articular grandes industrias de entretenimiento en las cuales dentro de su gama de productos, la información quedó inmersa y atrapada, produciendo una unificación de mensajes retransmitidos en los  diferentes formatos.

Grandes corporaciones vinculadas a sectores característicos de las burguesías nacionales, así como las empresas multinacionales de la comunicación  y la cultura,  se convirtieron en los grandes productores y emisores de información.  Esta concentración desdibujo aún más el ideal liberal de la información como instrumento de control popular  y de crítica a las precarias instituciones establecidas, puesto que estrechó los vínculos entre la libertad económica con la libertad de prensa y opinión, dejando así la responsabilidad social de la comunicación a los consumidores de las múltiples barajas que conforman el espectro de la información, la cultura y el entretenimiento. Otra consecuencia de esta situación es que estos medios al ser los principales emisores de pauta publicitaria, y al pertenecer a grandes corporaciones, han concentrado la misma, negando a la población y a los pequeños y medianos productores el acceso a este servicio.

No hay novedad en el hecho de que la información es manipulada según los intereses de las clases que poseen el poder económico y político en sus sociedades, la noción de hegemonía gramsciana, es decir, la capacidad de un grupo social para ejercer los lineamientos morales de la sociedad, es latente cuando pensamos los medios de comunicación, pero lo es aún más, con la consolidación del mercado global y la apropiación sistemática de corporaciones que establece una relación directa entre las corporaciones y la información emitida, de tal manera que los medios ya no solo legitiman el status quo del cual surge su ganancia, sino que son utilizados como dispositivos expresos para subvertir con mayor dinámica y consolidar nuevos órdenes institucionales que anteriormente requerían un mayor diálogo público, es decir, consolidaron la hegemonía con mayor efectividad.

Una mayoría considerable de los habitantes de esta ciudad,  encontramos en este mundo informativo y en este contexto, parte de los argumentos  con los que nutren y refuerzan nuestras creencias y opiniones. Vivimos en un contexto en el cual ha aumentado la explotación al trabajo y se ha mercantilizado el tiempo de ocio, lo cual ha reducido nuestras posibilidades de elección a la hora de optar por una información apta para el desarrollo de nuestras vidas y comunidades, lo que además, aumenta las barreras que hay entre las puertas de nuestros vecinos.



Sin embargo, este nuevo contexto, también ha revitalizado la creación de redes de medios alternativos y comunitarios, que buscan relucir las partes del mundo que son oscurecidas por el sistema de información mundial corporativo; sobre informando a contra corriente sobre los mismos eventos ya informados o subrayando los eventos que no tienen ni tendrán cabida en la agenda de las grandes corporaciones, estos medios empiezan a ocupar un lugar significativo en las sociedades al lograr enlazamientos regionales y mundiales que potencian su reproducción. Sin embargo su proyección no es suficiente para lograr abrir el cerco mediático producido por los medios masivos, y así lograr generar contextos para la transformación y movilización social, a partir de nuestros rasgos identitarios y de la discusión de las principales problemáticas a las que se ve enfrentada nuestra vida.

Esto sucede por las siguientes razones, la primera es que debido a la misma estructura oligopólica de mercado, la presencia de los medios comunitarios y alternativos es muy deficiente a nivel local y distrital, la segunda consiste en un contexto de reducida participación, generado, por las malas experiencias  representativas y participativas en las que se ha visto envuelta la población, la tercera, derivada de la anterior, es que estos medios comunitarios han generado espacios de participación de carácter gremial e incluso sectorial que no alcanzan a producir articulaciones para el ejercicio de la libre expresión de la ciudadanía, una cuarta razón es un problema de segregación en la educación que mengua las posibilidades de creación y producción en nuestros barrios, y por último, permanece la falta de responsabilidad política del Estado frente a una política de medios comunitarios y alternativos, ya establecida y con arreglos institucionales suficientes, para tener una política clara de fomento.  Estos son los retos para una política distrital y local coherente con un plan de desarrollo que busca atacar la segregación y revitalizar el contenido de lo público, a partir de la participación social y su movilización.  Esbozamos algunas líneas integrales y complementarias  para llevar a cabo esta labor.

Propuestas


1. Ganar la calle

 Liberación de los espacios de ocio, recuperación de la calle, como fomento al cariño y la comunicación; y como fortalecimiento a la participación, movilización y economía popular (ver documento.  Paso uno tomar la calle). http://amediacuadra8.blogspot.com/2012/05/primer-paso-ganar-la-calle.html



2. Que el Estado sea una herramienta contra el oligopolio de los medios y la segregación social.

La comunicación comunitaria tiene grandes oportunidades de visibilizarse y fortalecerse a la sombra del marco normativo con que cuenta. Tal como son el acuerdo 292 de 2007 y luego, los decretos 149 y 150 de 2008. El acuerdo plantea los principios democráticos que deben asumirse para promover la comunicación comunitaria; y los decretos plantean que esos principios deben ejecutarse con los medios comunitarios bajo ciertos arreglos institucionales. En el acuerdo, se expresa que son los medios o la comunicación comunitaria los que deben promover la solidaridad, la participación, la equidad, la reconciliación, etc., y los decretos le piden al Estado que promueva a los colectivos, redes y medios de comunicación comunitaria de la ciudad de manera activa.

Sin embargo esto no se ha cumplido, en la anterior asamblea de medios distritales se dio a conocer la pauta asignada a medios durante el anterior cuatrienio, correspondiéndole a los medios masivos más del 95% de los recursos destinados a publicidad durante el pasado cuatrienio (trescientos mil millones de pesos) Se requiere vincular efectivamente a la comunicación comunitaria y alternativa a las campañas institucionales y fortalecer a partir de los recursos públicos campañas comunitarias propias que logren una masificación de la comunicación comunitaria y alternativa a nivel local; vinculando recursos de los componentes de difusión de los diversos proyectos y actividades financiados por el Fondo de desarrollo local para la promoción y permanencia de medios comunitarios y alternativos locales y estableciendo alianzas con los sectores productivos para generar oportunidades a los ciudadanos de desarrollar medios en sus diferentes formatos.

La alcaldía local debería ser parte fundamental para el fomento de esta política pública, estableciendo estrategias, junto a las organizaciones sociales, para, como primera medida,  promover  formas libres y espacios continuos de intercambio, tal como lo es el software libre, o los parques,  y para liberar y gestionar recursos distritales de pauta publicitaria para los medios locales y para activar ejercicios de comunicación comunitaria en la población, que logren trascender el ejercicio mediático, en una articulación para la participación de los ciudadanos.

3.  La comunicación como promotora de la economía popular y fortalecimiento de la educación popular para la movilización

Mover la economía del pueblo.



En la localidad persisten actividades e iniciativas de economía popular, tales como, agricultura urbana; basurología y reciclaje; mercados campesinos y solidarios; medicina alternativa, consumos colectivos y conscientes, medios comunitarios, entre otras, que ayudan a mejorar de diferentes maneras las economías de los hogares y las comunidades.  Estas iniciativas son ejercidas en gran parte por organizaciones de base y colectivos de nuestros barrios.  Estas actividades promueven el fortalecimiento de líneas fundamentales que vinculen a la población a las discusiones y ejecución de la política pública, así como representan actividades acordes al plan de desarrollo como son: basura cero, fomento a la economía popular, fortalecimiento de lo público.

Al fortalecer los ejercicios de comunicación comunitaria y alternativa se busca entregar información y promover un intercambio justo que ayude a las familias y comunidades a encontrar maneras de organización y de prácticas que solucionen problemas de las economías domésticas y comunitarias, y que ayuden a mejorar las condiciones socioeconómicas de los habitantes de la localidad, ya sea mediante el uso privado de la información o participando en actividades ya existentes, pero desconocidas para la gran mayoría de la población y de las organizaciones sociales, esto se podría hacer, por ejemplo, mediante ferias populares itinerantes, correspondiendo al primer ítem de esta propuesta.

Educación para la participación y la movilización



Para una gran parte de la población y organizaciones sociales de la localidad de Techotiba existe un desconocimiento de lo que sucede en la localidad, en las instituciones administrativas locales y en las instancias de participación local, lo cual genera una falta de apropiación en los ejercicios de democracia participativa y un desconocimiento de las decisiones que se toman en estas instancias y que afectan el desarrollo y las diversas problemáticas de las comunidades. Para activar los mecanismos de participación, control social y movilización, es necesario que los habitantes tengan una oferta importante de información sobre lo que pasa en la localidad y en la administración de la misma, así como espacios de educación popular y diálogo permanente.

Se debe  tener en cuenta que los medios de comunicación alternativa y comunitaria tienen una incidencia en el desarrollo de las comunidades porque se ejerce control político y  representa los intereses que se tienen en común, lo más importante es que permiten el reforzamiento de los lazos sociales como una base simbólica para el cambio, por esto es primordial que los medios comunitarios y alternativos de la localidad, generen una comunicación de doble vía entre los sectores populares y la administración local para que se llegue a una gestión participativa en las decisiones que dicha administración ejecuta en el territorio, igualmente se optimizaría  una función de las alcaldías locales como es la promoción de la organización social y el estímulo a la participación de los ciudadanos y de las organizaciones en los procesos de gestión pública.  Se requieren procesos de formación enmarcados en escuelas populares que se desarrollen en la misma práctica de procesos de comunicación comunitaria para la participación, vinculando la producción, emisión y articulación de medios de comunicación, para fortalecer los vínculos sociales, fortaleciendo espacios formales (jornadas extendidas en colegios y universidades) y no formales de educación.  La tarea está por hacerse.

El pueblo
Casa Techotiba
Agosto 2012

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